Guía completa para construir un estante flotante de madera: Paso a paso con instrucciones detalladas y consejos expertos
Lo primero que haremos es preparar la madera. Examina el madero y utiliza una sierra de mesa para eliminar cualquier área estirada o áspera. Realiza un corte en cada lado para asegurarte de que la superficie quede lisa y en ángulo recto de 90 grados.
Una vez que la madera esté preparada, tomaremos medidas del ancho del estante y agregaremos una pulgada adicional. Por ejemplo, si el ancho es de 18 pulgadas, lo cortaremos a 19 pulgadas. Esta pulgada adicional nos permitirá perfeccionar los bordes más adelante en el proceso.
Ahora, necesitamos unir dos maderos. Como los maderos que tenemos no tienen las medidas exactas que deseamos, cortaremos un poco los bordes para eliminar cualquier curva. Coloca los dos maderos uno al lado del otro, asegurándote de que los bordes estén alineados correctamente.
Para crear los ensambles, utilizaremos una herramienta que nos permitirá abrir agujeros con el ancho deseado. Asegúrate de ubicarla en el centro de las líneas que marcaste y abre los agujeros en cada una de ellas. Una vez que hayas probado que los ensambles encajan perfectamente, marca la posición exacta donde abrirás el otro agujero en el otro madero.
Ahora, es momento de ensamblar los maderos. Colócalos uno al lado del otro, asegurándote de que los bordes estén alineados en el área del ensamble. Aplica presión y verás cómo automáticamente se genera una marca. Abre un agujero para que entre la otra mitad del ensamble. Repite este proceso para cada línea.
Una vez que todos los ensambles estén listos, utiliza un martillo y un madero auxiliar para ensamblar los maderos. Ten cuidado de no dañar los costados y asegúrate de mantenerlos presionados con clavos hasta que el pegamento seque. Deja que el ensamble se seque durante la noche.
Al siguiente día, verifica que el pegamento esté seco y que los ensambles estén firmes. Ahora puedes proceder a quitar los clavos y eliminar cualquier exceso de pegamento con una espátula. Si la madera presenta agujeros de puntillas, prepara una mezcla de pegamento y aserrín y aplícala en los agujeros, presionando para que penetre adecuadamente. Luego, deja que se seque y lija la superficie con papel de lija de grano 120, seguido de un cambio a papel de lija de grano 220 para suavizar todas las caras del estante.
A continuación, nos enfocaremos en los detalles decorativos. Para estabilizar la madera, asegúrala con clavos utilizando otra madera delgada como protección. Luego, utiliza una fresadora para hacer un borde decorativo en el frente y los costados del estante. Asegúrate de utilizar una cuchilla separada de la madera y acércala lentamente hasta que alcance el tope, deslizándola a lo largo de los bordes. Si los clavos te impiden fresar en algún costado, utiliza una tabla para asegurar la fresadora y completar el proceso.
Después de fresar, es posible que queden algunas astillas finas en los contornos del estante. Lija nuevamente con papel de lija de grano 220 para suavizar cualquier imperfección.
Pasemos ahora al soporte del estante. Corta una varilla de media pulgada con un tamaño de tres cuartos de largo del fondo del estante. Por ejemplo, si el fondo del estante es de 20 pulgadas, corta las varillas a 15 pulgadas de largo. Marca dos referencias en la parte trasera del estante y perfora dos agujeros ligeramente más profundos que el largo de las varillas.
Asegúrate de mantener el taladro vertical y utiliza una broca del tamaño adecuado para abrir los agujeros en la pared. Luego, inserta las varillas en los agujeros, asegurándote de que encajen correctamente.
Una vez que las varillas estén firmemente en su lugar, ensambla las dos partes del estante para verificar que todo esté bien ajustado. Si todo está en orden, puedes pintar o aplicar un tinte al estante según tus preferencias.
Ahora viene la parte de la instalación. Utiliza un detector de madera para encontrar los maderos dentro de la pared. Marca los lugares donde asegurarás el estante y perfora agujeros con una broca de media pulgada, asegurándote de que la cabeza del tornillo quede oculta. Luego, utiliza una broca del tamaño de los tornillos para completar los agujeros.
Coloca el estante en su lugar, asegurándolo por un lado y nivelándolo. Inserta los tornillos y, si es necesario, utiliza tarugos de plástico para asegurar el estante en lugares donde no haya maderos tras la pared.
Finalmente, ajusta los tornillos y verifica que el estante esté nivelado.
¡Y eso es todo! Ahora tienes tu propio estante flotante personalizado. No dudes en pintarlo o aplicarle un tinte según tus preferencias.
Si te han quedado te dejo el video completo para que lo veas. De todas maneras me gustaría que dejes tu comentario aquí abajo que tal te parecio y si tienes alguna sugerencia para compartir. Hasta la próxima!
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